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viernes, 28 de febrero de 2014
Top 10: Mejores Catchers de todos los tiempos (I parte)
No hay duda de que una de las posiciones más difíciles e importantes en el terreno de juego es la de receptor, ya que si bien es cierto su ofensiva puede pasar desapercibida, su contribución defensiva puede ser de tal magnitud como para ganar un campeonato. Por ello, un catcher pelotero cuarentón como Henry Blanco es apetecido por los equipos de las mayores aunque ya no le batee a nadie. Sin más preámbulos, disfruten mi top 10 de los mejores receptores de todos los tiempos.
#10 Michael
Kelly.
Su vida y carrera merecerían un especial aparte. Conocido como hombre apuesto y carismático, fue el primer hombre del béisbol que paralizó a los Estados Unidos. Escribió su autobiografía, era actor de teatro y en su honor se compuso la primera canción del género pop en ser la número uno en los rankings de las más escuchadas.
Su inteligencia le permitía sacar provecho de los vacíos en el reglamento. Se dice que sus travesuras llevaron a la modificación de decenas de reglas y la creación de otras tantas. Hizo una fortuna que dilapidó a medida que la ganaba. Huérfano, alcohólico y mujeriego, al mismo tiempo carismático, Kelly fue el querido por la afición en el siglo antepasado, la cual lo apodó “El Rey”, inspiró historias, cuentos, canciones y hasta películas, además de ser el atleta en popularizar la firma de autógrafos.
Ubicamos a Kelly en el puesto 10 porque no fue receptor durante toda su carrera, alternaba en el outfield y el infield. Murió de neumonía a los 36 años, antes de su muerte tuvo un hijo que solo vivió unas horas, su esposa tuvo que trabajar de costura hasta su muerte porque Kelly no dejó ninguna herencia. Su mujer lo describió como “Un niño grande, caritativo y de gran corazón”. Fue exaltado al Salón de la Fama en 1945 y el día de su inducción no había ninguno de sus familiares en la ceremonia.
Otro día, les escribiré más de él.
#9 Katsuya
Nomura
al debutar con los Nankai Hawks hasta 1980 cuando se retiró con los Seibu Lions.Nacido en 1935, perdió a su padre a los tres años de edad y su madre lo crió en la más dramática de las pobrezas.
En todos los equipos donde jugó fue un líder indiscutible. Aunque se le recuerda mas por sus proezas ofensivas, Nomura posee varios récords mundiales para receptores en el plano defensivo, como el de juegos (2918) e innings jugados detrás del plato, jonrones (657), ganó 9 campeonatos de jonrones, 8 de ellos seguidos, ganó 6 títulos de bateo y una Triple Corona. A pesar de la poca potencia de su brazo fue uno de los mas exitosos sacando corredores en las bases y su éxito se atribuye a que su inteligencia le permitía saber cuando alguien iba a salir al robo.
Sus jonrones son la segunda marca en el béisbol japonés, aunque ayudado en las pequeñas dimensiones del parque de los Hawks, el equipo con el que jugó mayormente. Además de la seguidilla de coronas de jonrones, también ligó por siete años seguidos el liderato de las impulsadas.
En el plano defensivo podríamos decir que Nomura es el paladín de la resistencia detrás del plato, 27 temporadas completas en esa posición, poseedor de la marca mundial de juegos detrás del plato con 2918 y en una ocasión catchó completo todos los juegos de su equipo, en un calendario que incluía 150 juegos, entre ellos 16 dobles carteleras, además de otras cinco campañas en las que jugó como receptor en todos los juegos de su equipo.
Además de receptor legendario en el béisbol japonés, entre 1970 y 1976 fue exitoso como manager-jugador y en los noventa dirigió a los Yakult Swallows a convertirse en una dinastía.
#8 Roy Campanella
#7 Mickey Cochrane
Campanella fue una de las primeras estrellas negras del
juego en las mayores. Su carrera en el más grande nivel del béisbol solo duró
10 años, sin embargo dejó su marca. Debutó con los Dodgers y
rápidamente se estableció como el mejor receptor de la Nacional en su época. En
apenas diez años bateó 242 jonrones e impulsó 856 carreras, fue Más Valioso de
la Nacional en tres ocasiones y asistió a ocho juegos de Estrellas. Su
porcentaje de éxito sacando corredores en las bases es el segundo más alto en la
historia de las mayores: 57%, su calidad para manejar lanzadores se vio
reflejada en que catchó 3 no hitters. Un accidente automovilístico en 1957 lo
dejó parapléjico por el resto de su vida y por ende acabó con su carrera.
Su carrera comenzó en las LIgas Negras del Béisbol de los Estados Unidos para posteriormente jugar en ligas latinoamericanas como México y Venezuela. Aparte de los hitos mencionados anteriormente, en cada una de sus campañas de Más Valioso bateó por encima de .300 con más de 30 jonrones y 100 remolcadas.
Campanella administraba una tienda de licores en los recesos de temporada y la noche del 28 de enero de 1958 mientras se dirigía a su casa luego de una jornada de trabajo tuvo un accidente de auto en el que se fracturó la quinta y sexta vétebra cervical quedando paralizado del hombro para abajo, aunque con terapia ganó luego un poco de movilidad en manos y brazos. Así terminó la carrera de Campanella.
Debutó en las mayores en 1925 después de solo una temporada en las menores y ya en 1928 fue seleccionado como el jugador Más Valioso y junto con Jimmie Foxx fue artífice del tricampeonato de los Atléticos en la Americana a finales de los veinte y principios de los treinta. Fiero y competidor en el terreno, deportista completo (tuvo actuaciones excelentes en cinco deportes en la Universidad), una vez arribó a las mayores se le dio el puesto titular sobre Cy Perkins (uno de los mejores catchers en ese tiempo), su condición de zurdo al bate le permitió en varias oportunidades ser usado como primer bate a pesar de su condición de catcher. Ya para su segunda temporada era considerado el mejor catcher de las mayores y mejoró mucho más sus habilidades defensivas.
En 1934 fue enviado a los Tigres de Detroit para ser manager-jugador y fue allí donde florecieron sus dotes de líder llevando a un equipo que había terminado quinto la temporada pasada al primer lugar de la liga, teniendo el además una gran temporada, valiéndole la distinción de Mas Valioso de la Liga, algo notable considerando que Lou Gehrig ganó la Triple Corona de Bateo ese año.
Al año siguiente Cochrane repitió su gran actuación frente a los Tigres llevándolos a ganar la primera Serie Mundial en la historia de la divisa. El 25 de mayo de 1937 en juego contra los Yankees de Nueva York recibió un pelotazo en la cabeza que lo mantuvo en coma por siete días, casi al borde de la muerte, pero pudo salvarse para luego retirarse para siempre del béisbol por órdenes de los médicos. Intentó entonces dirigir, pero ya había perdido el espíritu competitivo.
#6 Carlton Fisk
Famoso por ser el autor de uno de los mas dramáticos
jonrones en postemporada, Fisk es también reconocido como uno de los grandes
catchers de la historia. Apodado “El
Pudge”, fue el primero en ser seleccionado Novato del Año de forma
unánime. Fue el mejor receptor de la Americana en las décadas del 70 y 80. Por
mucho tiempo fue líder de todos los tiempos en jonrones para catchers en las
Grandes Ligas con sus 351 que fueron superados por Mike Piazza. Es recordado como un fiero competidor, un maestro en el manejo
de los pitchers y un líder en el terreno de juego.Su primera temporada completa en las mayores fue en 1972 con los Medias Rojas de Boston, ganando su primer guante de oro, el premio Novato del Año de forma unánime y liderando la liga en triples, siendo el último catcher en liderar las mayores en ese departamento. En 1974 sufrió una grave lesión producto de una colisión en el plato, de la cual tuvo que ser intervenido y los doctores le dijeron que no volvería a jugar otra vez, sin embargo estuvo de vuelta en 1975. Durante sus ocho campañas con Boston, fue de los mejores catchers ofensivos de la liga y promedió 20 jonrones y 70 impulsadas por temporada en su estadía con los patirrojos quienes por un error lo dejaron libre y firmó con los Medias Blancas para comenzar con ellos la campaña de 1981.
Luego de una lesión en 1985 Fisk comenzó un revolucionario sistema de entrenamiento que no solo salvó su carrera sino que le dio mas poder, regresando en la campaña de 1987 con 37 jonrones a los cuarenta años, tope en su carrera. En 1991, a los 44 años, se convirtió en el catcher de mayor edad en participar en un Juego de Estrellas y en 1993 estableció récord de más juegos en la posición de receptor, marca que fue luego rota por Iván Rodríguez. Pocos días después de establecer el récord fue dejado en libertad por los Medias Blancas y llegó al final de su lutruosa carrera. Entre otras notables estadísticas, Fisk tiene el honor de ser el pelotero con mas jonrones despues de los 40 años, con 72 vuelacercas, el mismo número que vistió con los White Sox y que fue retirado por el equipo.
Como nota curiosa, Fisk tiene el record del juego mas largo para un catcher, fueron 25 innings el 9 de mayo de 1984 contra los Cerveceros de Milwaukee.
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